Thursday, May 15, 2008

El leon y la zorra. Fábula infantil de Félix María Samaniego. Literatura infantil y juvenil.



Un León en otro tiempo poderoso,
Ya viejo y achacoso,
En vano perseguía, hambriento y fiero,
Al mamón Becerrillo y al Cordero,
Que trepando por la áspera montaña,
Huían libremente de su saña.
Afligido de la hambre a par de muerte,
Discurrió su remedio de esta suerte:
Hace correr la voz de que se hallaba
Enfermo en su palacio, y deseaba
Ser de los animales visitado.
Acudieron algunos de contado;
Mas como el grave mal que lo postraba
Era un hambre voraz, tan sólo usaba
La receta exquisita
De engullirse al monsieur de la visita.
Acércase la Zorra de callada,
Y a la puerta asomada,
Atisba muy despacio
La entrada de aquel cóncavo palacio.
El León la divisó, y en el momento
La dice: «Ven acá; pues que me siento
En el último instante de mi vida,
Visítame como otros, mi querida.»
«¡Como otros! ¡Ah señor! he conocido
Que entraron, sí, pero no han salido.
Mirad, mirad la huella,
Bien claro lo dice ella;
Y no es bien el entrar do no se sale.»

La prudente cautela mucho vale.

Wednesday, May 07, 2008

Mc Luhan y la modulación de futuro

cyberhumanitatis-universidad de Chile




Manuel JofréUniversidad de Chile

1. Problematización
Tradicionalmente, se piensa que el pensador, escritor y académico Marshall McLuhan se convirtió en el principal analista de las comunicaciones del siglo XX. Más allá de ello, los conocedores de su obra escrita saben que el mundo digital y electrónico ya estaba previsto anticipadamente por este intelectual canadiense antes que se institucionalizara como elemento globalizador, centralizador y canonizador. Quien haya leído unas pocas páginas de su obra advertirá que McLuhan incorpora la filosofía, la historia, la cultura, las artes, las ciencias y las tecnologías contemporáneas en su reflexión. Su reflexión es transversal, politemática y de multiples perspectivas. Pese a ello, sin embargo, la pregunta sobre el lugar y el sentido del aporte sustancial de McLuhan sigue ofreciendo numerosas y contradictories respuestas.
Estudiar el aporte fundamental de McLuhan es un esfuerzo académico que incluye aspectos comunicológicos, discursivos, estéticos y literarios que implican profundamente a la historia intelectual canadiense del siglo XX, todo lo cual es útil para otras experiencias sociales. Nuestra argumentación es que la obra investigativa de este principal teórico de las comunicaciones canadiense ha sido descuidada en su propio país, donde los estudios superiores no han sabido acoger y desarrollar la impronta mcluhaniana.
No se trata de que su contribución a la teoría literaria o a la historia de la estética haya sido descuidada. Lo central es que McLuhan, pensando desde Canadá, creó una teoría de los medios y también una teoría de la cultura. Su obra enciclopédica, heredera del trivium medieval, consolidó las humanidades canadienses, al forjar una reflexión inédita entre las comunicaciones, la historia y la cultura.
En 1960, McLuhan abrió la comprensión del futuro inmediato para el mundo mediante su reflexión acerca de los efectos de los medios de comunicación. Al final de su vida, su reflexión era aun acerca de las leyes de los medios de comunicación en su vinculación con los modelos de funcionamiento del cerebro humano, estableciendo de paso una sólida historia de las comunicaciones y la cultura en el mundo.
Con ello, configurará el sentido e incluso los efectos del mundo digital-virtual que crece entre nosotros, sin dejar de lado la formulación de una estrategia semiótico-discursiva de amplio espectro para entender las creaciones culturales, comunicativas y discursivas del ser humano. McLuhan incluyó en su reflexión la comprensión de la literatura y las acciones humanas como procesos de significación, y así mismo elaboró una historia cultural y estética orientada tanto al canal como a los agentes receptores.

2. McLuhan en Canadá
En el caso de McLuhan, la experiencia canadiense contribuye a la concienciación acerca de la importancia global de la diversidad cultural y el multiculturalismo. Esto que está en base de la reflexión de McLuhan es reforzado por Canadá como un país de constante enriquecimiento cultural, lo cual se reproduce en la reflexión de las ciencias humanas y sociales canadienses, conjuntamente. McLuhan es uno de los fundadores de un nuevo género discursivo epocal, la teoría, el cual supera las limitaciones del discurso filosófico y del discurso científico, en las condiciones específicas del carácter de punta y fronterizo al mismo tiempo de Canadá como formación social.
En este marco, los escritos de McLuhan acerca de la vida cotidiana occidental y su imbricación con los medios de comunicación han generado una re-escritura de la cultura occidental. Entre otras contribuciones, ha propuesto una nueva articulación entre géneros, formatos, canales y discursos. Cabe formularse, sin embargo, la pregunta específica acerca de cuál sentido humano particular es extendido mediante la teoría, por la preeminencia y desarrollo del discurso teórico, como percepción y modelación de lo real.

3. Etapas en la obra de McLuhan
El proceso de producción teorética de McLuhan despegó desde la literatura canadiense y luego de la anglosajona. Su teoría general avanzó y se enriqueció profundizando en una fenomenología de los medios de comunicación, configurando un adecuado marco histórico de tipo culturalista. De allí, sus afirmaciones comenzaron a fluir acerca de la totalidad de la sociedad occidental. Sin embargo, en cada etapa de su escritura se pueden percibir diversas constelaciones y conjuntos léxicos que sugieren diversos descubrimientos, propuestas e incluso sistematizaciones.
De estas tres etapas en la obra mcluhaniana emergió un conjunto de conceptos bien conocidos de índole relacional, los cuales pueden ser aplicados a cualquier aspecto de la semiósfera o mundo discursivo, desde la teoría literaria hasta las grandes tendencias epistemológicas subyacentes. Ya en los sesentas McLuhan había formulado preguntas acerca del destino del proceso literario, y consecuentemente, acerca de la propia teoría literaria. ¿Cómo responden estas series culturales al medio ambiente digital/virtual? ¿En qué sentido la teoría general de McLuhan es semiótica? ¿Cuáles son los aportes mcluhanianos a una teoría de la sensibilidad o su concepción de la ideología?
Los escritos de McLuhan comunican intuiciones, propuestas, análisis, datos históricos, proyecciones comunicativas, implicaciones culturales, encuadres discursivos, todo lo cual se orienta en múltiples direcciones. Falta, sin embargo, fundamentar, creativamente, las categorías emergentes en diferentes puntos de su reflexión, frente a los frecuentes nódulos de la teoría actual, especialmente a los que dicen relación con la producción discursiva, los circuitos logosféricos, las funciones semióticas y la decodificación pragmática, por mencionar algunos aspectos.
Finalmente, en relación a McLuhan, una investigación debe también orientarse hacia la relación entre discurso monológico (todas las voces fusionadas en una) versus los discursos dialógicos (distinción clara entre las voces). Aquí nuevamente hay que preguntarse en qué sentido la teoría toma parte en esta coyuntura ideologica y cuánto de su obra es parte de una estética de la recepción. ¿En que sentido es híbrida la producción cultural? Y finalmente, ¿cómo se combinan en McLuhan los aspectos modernos y post-modernos, y cómo funciona su ironía, en este respecto?
Si se entiende al pensamiento aforístico mcluhaniano como parte de la gran poli-matriz post-moderna se advierte un predominio de temas, estrategias, derivaciones y encuadres de índole postmoderna en la obra del pensador canadiense. McLuhan parte del marco contextual fijado en Canadá por la escritura sobre las comunicaciones de Harold Innis. Innis antecede a McLuhan (contexto o intertextualidad discrónica) y Northrop Frye, en cambio, es parte de la intertextualidad sincrónica, es decir, de las otras formulaciones teóricas que circulaban en su época y que dialogaban con la escritura de McLuhan.

4. McLuhan revisitado
En la obra de McLuhan hay una atención preferencial hacia el presente que consiste en un intento en explicar la situación actual occidental a partir de las tecnologías en uso. Pero también hay en su obra, especialmente en La galaxia Gutenberg, una historia de la cultura y de la mediósfera, desde la antiguedad hasta el presente. En este sentido se puede hablar de una lectura y una re-escritura de la historia de la humanidad desde el punto de la comunicación discursiva por parte de McLuhan.
Las características orales, escritas, impresas y electrónicas, de acuerdo a McLuhan, son el denominador a través del cual proponer que la historia humana es la historia cultural de las comunicaciones y los medios (canales) utilizados en cada época. Esta producción le confiere gran importancia al desarrollo de los medios como tecnologías, y de paso esto le permite a McLuhan la formulación de diferentes modelos comunicativos.
Los medios de comunicación, entendidos como extensiones de los sentidos perceptivos del ser humano, se relacionan directamente con la organización del sensorium (articulación orgánica y paradigmática de los sentidos perceptivos colectivos), y se ligan con la estructura bicameral del cerebro humano. Sólo en este marco es posible entender las oposiciones entre medios hot y medios cool, o la oposición entre figure y ground, presentes en distintos momentos de la obra mcluhaniana.
Nuestra tendencia natural sería ver la literatura, verbalización imaginaria, como una extensión del ser humano, punta de lanza en la lucha contra la linearidad, mediante su realización electrónica, virtual o digital en los tiempos presentes. Y la epistemología o metodología indispensable para comprender los procesos culturales sería la superación del binarismo estructural y de la dialéctica marxista, mediante las tétradas post-modernas constitutivas de las leyes de los medios.
Así, el sistema semiótico y discursiva de McLuhan se yergue a partir de la proposición e integración de una historia cultural y de una fenomenología de la actualidad. Oposiciones como lo izquierdo y lo derecho, por ejemplo, implicarían una relación entre medios, tecnología, significación y medio ambiente, la cual puede ser entendida como una táctica hermenéutica para la decodificación crítica.

5. Proyecciones y cuestionamientos
Si el medio ambiente es creado por la tecnología como fuerza modeladora, también es cierto que todos los medios son medio ambiente. En este sentido, se ha sugerido que el pensamiento de McLuhan consiste nuclearmente en una teoría de la mediamorfosis, es decir, acerca de los cambios en los medios. Y si un medio antiguo es siempre el contenido de un medio nuevo, más renovado, la metodología de McLuhan para la producción cultural implica una estética, amen de una epistemología y una metodología.
La escritura de McLuhan incluyó aspectos futuristas, visuales, axiomáticos, paradojales, post-textuales, icónicos que llevan al consumidor a convertirse en el productor del discurso. Lo importante es que esto acontece en una integración entre conocimiento enciclopédico y una visión o arquetipo global.
Cuánto de Canadá y cuánto de Cambridge hay en la reflexión mcluhaniana, cuánto de sistematización y nuevas intuiciones hay en sus teorías póstumamente reconstruidas, cuánto de teoría hay en las cartas personales de McLuhan, y cuánto de McLuhan hay en los libros escritos con otros autores y seguidores de McLuhan, como muchas otras interrogantes, son preguntas que aun continúan abiertas a la reflexión.
En la reflexión de McLuhan los sentidos, como canales perceptivos, siempre intentan superar la fragmentación de ellos mismos. La base de la civilización es el alfabeto, porque provoca una destribalización. La tribu es oral. Pero los sentidos cambian y el habla implica todos los sentidos. La separación de los sentidos es la destribalización. De allí en adelante, comienza un determinismo tecnológico.
Los sentidos son sistemas abiertos, como lo prueba la transición del mundo mágico del oído al mundo neutral del ojo. Lo oral allí era lo tribal. El habla implicaba la integración de todos los sentidos, pero la separación de los sentidos llevó a la destribalización. La manuscritura no se disoció de la voz pero si de lo impreso. El feudo medieval era pues en verdad una prolongación de lo tribal.
El espacio visual, lineal, espacial y alfabético, con su centralización típicamente de lo occidental, con su secuencialidad y carácter analítico, cede gradualmente, a un espacio acústico, discontinuo, con diversos núcleos, donde se concibe al mundo de manera envolvente. Se ha transitado del mito a la letra. Y la escritura, como extensión de la visión, es un sistema abierto donde la oposición entre lenguajes referenciales y no referenciales tiene una gran vigencia.
Que McLuhan haya avizorado el futuro no es nada nuevo; ciertos hombres, en ciertas épocas, ven más allá del horizonte. El punto es que el futuro digital no tiene aun una conformación clara y la propuesta de McLuhan sigue vigente incluyendo las mutaciones virtuales de la Internet (información, sincronicidad, pluralismo, anonimato), a través de la primera generación del correo y del chat, y la segunda generación del log y del photolog.

6. Puntos de partida
Aunque no para la mayoría, un cierto número de latinoamericanos tiene acceso a estas tecnologías, y desarrolla estas problemáticas. Los intelectuales orgánicos de la informática van desde los académicos a los profesores y desde los estudiantes a los mandos medios (oficinistas, administrativos de cuello blanco) que ínter-actúan frente a una pantalla regularmente.
Recientemente, Derrick De Kerkhove señalaba que la nueva tecnología afecta el rango, el contenido y la distribución del conocimiento. La extensión de la pantalla, triunfo de la digitalización, la virtualidad y el microprocesamiento, se manifiesta en las pantallas del celular, el computador y el televisor. Ahora ya hemos superado la etapa de la wikipedia, la construcción social del conocimiento. De Kerkhove insiste en que la pantalla es una extensión cognitiva, un procesador de información, según entendemos. Si se considera la red (web), el desarrollo debe considerar desde los videos juegos avanzados hasta la creación de Yahoo.
La extensión de los procesos cognitivos fuera de la mente humana afecta a todos los campos del saber humano. En la era digital, prevista por lo electrónico, la formación del conocimiento pasa por la hipertextualidad, los mensajes de texto, el comercio electrónico y la banda ancha. Para De Kerkhove, la implosión digital implica una "glocalización", es decir una nueva articulación de lo global y lo local. Esto nuevo, la red, es un caos ordenado en cada momento.
Si lo esencial de la estrategia moderna mecánica era la separación del texto del contexto, y la privatización del lenguaje, ahora hay un proceso de internalización de lo cronotópico, del yo. Esto comienza a emerger en la revolución "sin cables". La noción de discurso permitiría a la idea de texto desarrollarse hacia el hipertexto. Del especio aleph (alfabético y borgiano) hemos avanzado, según De Kerkhove, al principio-e (electronic, e mail) donde al cambiar los medios, cambiaran también los paradigmas epistemológicos y las formas de escritura, como así mismo la jerarquización entre los diferentes canales mediáticos. La literatura será un punto de observación privilegiado en torno a los procesos de conectividad propiciados por el nuevo medio ambiente electrónico.

7. Necesaria finalización
McLuhan continúa dialogando con el futuro que vendrá en el momento inmediato a éste. Las proyecciones y desarrollos de sus sugerencias y análisis coyunturales llevan a nueva re-lecturas e interpretaciones. El siempre pensó que la tarea ineludible de cada profesor era proponer una nueva interpretación de la historia previa. Esa era parte de la gran construcción discursiva epocal.
Canadá ha aportado a la historia universal con un pensador único de gran originalidad. Los pueblos deben también dialogar con sus pensadores. Aunque se tienden a privilegiar las ideas más generales de McLuhan, hay también en sus planteamientos acerca de Canadá y su cultura algo que es decisivo y que tiene que ver con la identidad de este país único en su conciencia de frontera y de construcción plural y realista de un futuro conjunto.

Revista de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad de Chile ISSN 0717-2869

Tuesday, May 06, 2008

acerca de la Glocalización

Ya había leído algo sobre el tema. Incluso quien escribe el artículo inferior, toma este nuevo término con distinto significado o en distinta dirección.

Encontré este artículo del filósofo José Pablo Feinmann, que me pareció interesante e invita a la reflexión.
Es obvio que si queremos construir un mundo mejor; éste será o tendrá que ser sobre bases más sólidas que sobre los paradigmas actuales de: verdad, justicia, desarrollo, evolución, entre otros.

Se los dejo y... hagan lo que quieran!!


La glocalización


Por José Pablo Feinmann


Occidente siempre buscó universalizar su cultura creyendo –y no podía sino creer algo así– que, al hacerlo, incorporaba a los países “occidentalizados” a una civilización superior. Inglaterra tuvo éxito en esa empresa. Y Estados Unidos la heredó y hoy la propugna con la misma convicción. El concepto que surgió –como consecuencia, también, del poder “universalizador” de los mass media– fue el de globalización. Luego del atentado del “nine eleven”, la potencia del Norte, la superpotencia que garantiza e impulsa la globalización del Occidente actual, se sintió poderosamente herida. No imaginamos todavía hasta qué punto. Y los países que se resisten a la globalización norteamericana afirman su diferencia. Que un país afirme su derecho a ser diferente a la universalización que propone un Imperio es un signo de debilidad para ese Imperio. Se debiera suponer que la gran potencia bélica se basta para imponer su cultura como la cultura de todos, como la “cultura universal”. No puede haber “diferencias” cuando se plantea un “orden global” y más aún si ese “orden global” responde a la estrategia de una “guerra global”.
Hemos llegado al punto. Cuando Inglaterra universalizaba su cultura, cuando entraba en la India o en China, lo hacía para expandirse y para ganar mercados. Hoy, Estados Unidos se globaliza porque necesita librar una “guerra global”. ¿Por qué? ¿Es el entero planeta su enemigo? No, pero su enemigo puede estar en cualquier parte del planeta. El terror del terrorismo es su no-lugar. Hitler estaba en Alemania. Stalin en la Unión Soviética. Los vietnamitas en Vietnam, pero les bastó meterse en la selva para ser inhallables, para no estar y estar. Con sólo eso humillaron al Imperio. El terrorismo no tiene territorialidad. ¿Dónde está Bin Laden? ¿Desde dónde se opera la Jihad-War? Así, el terrorismo elude la globalización. Y el Islam –hacia donde apuntan los misiles del Imperio–- afirma su derecho a la diferencia, que es su derecho a la identidad. No se globaliza. Se glocaliza. Esta glocalización es el establecimiento, la delicada precisión de una diferencia que ni siquiera se plantea como lo diferente de Occidente, sino que se plantea como una diferencia en-sí, es decir, como una identidad. La glocalización sería, entonces, la globalización de lo propio. Lo diferente del Imperio se da su identidad y esa identidad es protegida por una globalización de sí misma que la protege, que la circunda, que la torna inexpugnable. Esta globalización de una diferencia inexpugnable es la glocalización. Lo glocal contra lo global. Pero no como su contracara ni como su antítesis, sino como su absoluta alteridad. No somos lo Otro del Imperio. Simplemente no somos el Imperio. Este orgullo, esta arrogancia política y cultural preocupa al Imperio. Si tenemos en cuenta que Inglaterra forma parte de ese Imperio (supongo que no se discutirá esta afirmación: no habrá empresa desatada por Estados Unidos que no cuente con el respaldo de Inglaterra) es necesario tomar en cuenta un informe del Centro de Desarrollo, Conceptos y Doctrinas del Ministerio de Defensa británico. El informe está atenazado por la paranoia. La paranoia es un elemento de las guerras preventivas. Diríamos, incluso, que la paranoia es el ser de la guerra preventiva. El Informe sorprendió a todos. Lo que más alarma es la posibilidad de colocar muy pequeños chips en el cerebro. Esto posibilitaría a grupos terroristas movilizar algo que los expertos llaman flashmobs. Si incurrimos en cierta necesaria obsesividad nos enteraremos, por medio del exhaustivo Diccionario Simon and Schuster, de los múltiples –y todos incómodos o francamente atemorizantes– significados de la palabra mob, que, a saber, son: populacho, plebe, vulgo, masas, chusma, canalla, turba, tumulto, multitud de gentes. Nada de esto agrada al Imperio ni a sus ciudadanos. Un flashmobs sería una “multitudes de gentes” coordinadas por chips y arrojadas a acciones terroristas, difícilmente controlables por las fuerzas del orden. Estos expertos británicos prevén la resurrección del marxismo, algo que ni los marxistas (o muchos de ellos) esperan todavía. Habrá explosiones migratorias. Algo que es lógico. “The barbarians” están a las puertas de las ciudades y aunque los muros se levantan por todo el orbe no pueden contenerlos. Bush acaba de viajar a Yuma, que es un pueblo de Arizona en que ocurrían tantas hermosas películas de cowboys (entre ellas la inolvidable El tren de las 3.10 a Yuma, con Glenn Ford y Van Heflin) y que ahora ha perdido todo encanto, se ha tornado peligrosa por su cercanía con la frontera de México. El informe se empeña en ser desalentador, aflictivo. Dice, caramba, que en próximas guerras (y si algo es indubitable en esta época son “las próximas guerras”) se emplearán armas neutrónicas, las cuales, ustedes saben, matan a las personas, pero no a las cosas, y serían usadas para limpiezas étnicas en un mundo cada vez más superpoblado. La superpoblación mundial es un problema grave para los países “desarrollados”. Porque las nuevas poblaciones surgen en esos países a los que, cínicamente, se llama en “vías de desarrollo”. Y esto es una infame mentira. No es que los “países desarrollados” vayan adelante en el “tren de la historia” y los países “en vías de desarrollo”, por ir en ese mismo tren, alguna vez los alcanzarán. Mentira. Falso. No hay una sola vía. Los países desarrollados van por su carril. Y los otros van por otro, que conduce del subdesarrollo a su profundización. El Informe, por último, plantea problemas entre China y el Islam, dado que los chinos se desarrollan a ritmo de vértigo pero son ateos, han institucionalizado su ateísmo, y esto es intolerable para el Islam que tiene al marxismo entre los mayores enemigos de los preceptos del Corán por su corazón materialista. Son, así, blasfemos, algo que no conviene ser a los ojos de un islámico. Asimismo, el incorregible (campeón de la glocalización) Mahmud Ahmadinejad, que no hay día que no haga algo para desatar la invasión norteamericana, que es inminente, anunció que produce uranio enriquecido a escala industrial, y la agencia nuclear de la ONU, preocupada, dijo que Irán tiene cien mil centrifugadoras. A todo esto se añaden los problemas por el clima, que cualquier conflicto nuclear empeorará tal vez trágicamente.
Pero hay algo más grave. Si Estados Unidos invade Irán el terrorismo entrará en una faz altamente agresiva. El terrorismo es como el viento, inapresable. Estados Unidos confía en su símbolo imperial: el águila de la guerra. Ella descargará su furia. Son nietzscheanos. El águila guerrera norteamericana es el ave de rapiña que tanto placía a Hitler y a Goebbels y al teórico nazi de Nietzsche: Alfred Bauemler. Nietzsche, en la Genealogía de la moral, había escrito: hacia fuera, donde comienza lo extranjero, la tierra extraña, los alemanes son “mucho mejores que animales de rapiña dejados sueltos. Allí disfrutan la libertad de toda constricción social (...) allí retornan a la inocencia propia de la conciencia de los animales rapaces, cual monstruos que retozan, los cuales dejan acaso tras sí una serie abominable de asesinatos, incendios, violaciones y torturas con igual petulancia y con igual tranquilidad de espíritu que si lo único hecho por ellos fuera una travesura estudiantil (...) Resulta imposible no conocer a la base de todas estas razas nobles, el animal de rapiña, la magnífica bestia rubia, que vagabundea codiciosa de botín y victoria” (Nietzsche, La genealogía de la moral, Alianza, Madrid, 2001, pp. 54/55). La “magnífica bestia rubia” de Nietzsche –que inspiró a los nacionalsocialistas– es hoy el águila guerrera del Imperio Bélico Comunicacional.
Pero (dijimos) hay algo peor que todo esto. Estados Unidos invadirá Irán y el terrorismo concentrará su horror, su retaliación en las ciudades, en los civiles. Paul Virilio, el notable estratega francés, ha escrito textos certeros, pero temibles. Vivimos una descomposición de la guerra clásica. Hay una inversión del número de víctimas. En los conflictos recientes, el 80 por ciento está del lado de los civiles. En la guerra tradicional era a la inversa. Ya nada es “tradicional”. Todo cambió. “Si antaño (escribe) se distinguía claramente la guerra internacional de la guerra civil –la guerra de todos contra todos–, de ahora en más toda guerra que se precie de tal es primero una guerra contra los civiles” (Paul Virilio, Ciudad pánico, Libros del Zorzal, Buenos Aires, 2006). El título del libro es claro, ¿verdad? Ciudad pánico. Los yanquis bombardean Oriente. El terrorismo, que es el viento, lo inapresable, el no-lugar, lo evanescente, golpea en las ciudades occidentales. ¿Qué dolerá más? La próxima “guerra total”, augura Virilio, será una “guerra civil mundial” y serán las poblaciones de las orbes multipobladas las ofrecidas en holocausto al caos demencial de la guerra.
¿Qué hacer? Están todos locos, enajenados de odio y de miedo. Bush, Ahmadinejad, Chávez, que lo recibe incluyendo a América latina en un conflicto protonuclear que nos tenía, al menos, algo apartados. Sólo algo nos resta por hacer. No es mucho. Es apenas algo: conseguir, en lo posible, que todo sea menos brutal. Que el hombre no es sólo ese ser destructivo y tanático. Que también hay en él una chispa sagrada, algo santo, sublime, algo que hizo la Sixtina, el Guernica, la Sonata en si menor de Liszt, la balada Nº 1 de Chopin, la amistad que lleva a un tipo a ir hasta el mismísimo fin del mundo si su amigo está mal y lo necesita, el amor, en todas su formas, el amor, carajo. Porque sobre todo eso quieren matar.